Para venir a gustarlo todo,
no quieras tener gusto en nada.
Para venir a saberlo todo,
no quieras saber algo en nada.
Para venir a poseerlo todo
no quieras poseer algo en nada.
Para venir a serlo todo,
no quieras ser algo en nada.
Para venir a lo que no gustas,
has de ir por donde no gustas.
Para venir a lo que no sabes,
has de ir por donde no sabes.
Para venir a poseer lo que no posees,
has de ir por donde no posees.
Para venir a lo que no eres,
has de ir por donde no eres.
Cuando reparas en algo
dejas de arrojarte al todo.
Para venir del todo al todo,
has de dejarte del todo en todo.
Y cuando lo vengas del todo a tener,
has de tenerlo sin nada tener.
3 pensamientos +:
pasmado me quedé
No querer. No tener. Nada. Totalmente Zen. ¿Todavía alguien duda de la universalidad de Aquello, más allá de lenguajes, culturas, formulaciones?
Un abrazo bien fuerte.
Más allá del "pasmo", lenguajes y culturas y después de todos los terrores: la risa.
Después de leer esta poesía, quedarme tan pasmada como marcos y llegar a la misma conclusión que Siddharta, me pasó una cosa que me gusta más que mucho: me dio la risa.
Saludos ^^
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