¿Qué sería yo sin mi "importante" historia? o... ¿qué sería de mí sin ella?

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2 pensamientos +:

nubeaguablog dijo...

¡Buena pregunta!
¿Y quién es ese "yo" que hace la pregunta?
José Hierro lo contesta así:

Después de todo, todo ha sido nada,
a pesar de que un día lo fue todo.
Después de nada, o después de todo
supe que todo no era más que nada.

Grito «¡Todo!», y el eco dice «¡Nada!».
Grito «¡Nada!», y el eco dice «¡Todo!».
Ahora sé que la nada lo era todo,
y todo era ceniza de la nada.

No queda nada de lo que fue nada.
(Era ilusión lo que creía todo
y que, en definitiva, era la nada.)

Qué más da que la nada fuera nada
si más nada será, después de todo,
después de tanto todo para nada.

Curiosamente esta poesía se llama "Vida" y se la dedicó a su nieta.
Se podía recitar perfectamente después de zazen
A mi, personalmente me emociona... y me la recito muchas veces al cabo del día...
bs

mikaela dijo...

Qué buena, qué buena, qué requetebuena!

No la conocía y la voy a memorizar ahora mismo (me encanta memorizar. Reminiscencias de la tradición oral, supongo).

Te la debo, unsui.

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